¿Estás Preparado para el Futuro del Aprendizaje Social?
¿Estás Preparado para el Futuro del Aprendizaje Social?
Aprendizaje social: Un modo de vida
Con el Internet lleno de recursos de información y herramientas para el aprendizaje, los maestros pueden ser facilitadores de información con un mayor énfasis en la explicación y el pensamiento crítico en lugar de ser la fuente de diseminación. Los sistemas formales de aprendizaje en algunos casos han sido más lentos en adoptar este modelo, preocupados legítimamente por la precisión del material y la consistencia. Sin embargo, con un número cada vez mayor de personas accediendo a información en entornos de aprendizaje, la necesidad de que estos sistemas formales adopten el cambio tecnológico es muy clara.
Donde antes un capítulo memorizado sobre el movimiento renacentista llevaba a que los estudiantes perdieran interés y, en última instancia, olvidaran la lección, ahora la tecnología de realidad aumentada permite a los alumnos tener una “experiencia” inmersiva de la era renacentista. Para la generación actual de “nativos digitales” que comienzan a usar tabletas y teléfonos inteligentes incluso antes de hablar, el aprendizaje social no es una alternativa, sino una forma inherente de vida. El desafío radica en cómo inculcar el conocimiento del maestro, sus habilidades y su eficacia en la explicación en el casi infinito mundo de conocimientos que los estudiantes obtienen a través de publicaciones compartidas en Facebook, enlaces en Twitter, videos de YouTube, hilos de Quora o cualquier otro recurso en línea que constantemente emerge y crece.
Considerado desde este ángulo, el desafío es realmente una oportunidad para fusionar la ubicuidad y la gran capacidad de información presente en estas plataformas con la inspiración y el compromiso de los maestros para mejorar constantemente y dedicarse al aprendizaje avanzado. El aprendizaje social ya está demostrando no ser solo un sistema alternativo, sino la norma creciente y la herramienta que moldeará la educación del futuro.
¿Es tu Sistema de Gestión del Aprendizaje (LMS) compatible con el aprendizaje social?
Debido a los múltiples puntos de acceso a la información, los estudiantes necesitan menos dirección para encontrar un conocimiento específico. Lo que los estudiantes realmente necesitan es un entorno seguro y estructurado donde puedan utilizar los recursos de su elección (incluyendo texto, audio y/o video) para discutir, comunicarse y colaborar. El aprendizaje puede ser más atractivo e interactivo de esta manera. Si bien las plataformas de aprendizaje han sido parte integral de la educación escolar y universitaria durante mucho tiempo, en algunos casos las herramientas y los sistemas existentes no han seguido el ritmo de los cambios tecnológicos e innovadores para ofrecer una experiencia de aprendizaje verdaderamente colaborativa. En muchos casos, los sistemas de gestión del aprendizaje (LMS) se limitan a automatizar el aprendizaje formal o simplemente agregan algunas herramientas de redes sociales para complementar su modelo de entrega.
Un LMS es fundamentalmente un marco mediante el cual los estudiantes y los maestros pueden integrar su aprendizaje en un sistema unificado. Debido a la diversidad de materiales de origen, los educadores y los estudiantes necesitan una plataforma segura que les permita trabajar en documentos compartidos, tomar y intercambiar notas, iniciar chats en vivo y llamadas de conferencia, o comenzar
un hilo de discusión con otros estudiantes. Los aspectos diferenciadores de un enfoque tradicional incluyen la flexibilidad, el alcance, el ámbito y la escala, que permiten a los estudiantes e instructores la libertad de participar y explorar el material a su manera. Con la gran cantidad de contenido disponible, junto con la diversidad de opciones de entrega de plataformas, la importancia de un sistema estructurado que proporcione una integración fluida ofrece una ventaja en el conocimiento.
Este entorno seguro y encriptado en un solo punto evita cualquier posibilidad de filtración de contenido o violaciones de derechos de autor. Además, desde una perspectiva de aprendizaje, los beneficios para los estudiantes y los maestros incluyen el acceso desde múltiples dispositivos, el aprendizaje remoto, la fluidez en las pruebas y evaluaciones, y el avance en la comprensión que lleva a ofertas de mayor nivel.
La tecnología está cada vez más integrada en la ecuación trabajo/vida, y ahora los educadores y los estudiantes necesitan una plataforma inteligente, acorde con la tecnología inteligente, que guarde cada interacción con el contexto del tema, la sección, las notas y otros materiales de referencia junto con la fecha y la hora, creando un archivo de contenido sólido que permite el acceso en cualquier momento.
Herramientas como Skype, Google Drive, OneNote, OneDrive, Zoom y otras son algunos de los canales más utilizados para compartir contenido, comunicarse y trabajar juntos. La integración de estas tecnologías en la nube con los sistemas de gestión del aprendizaje es fundamental para crear una plataforma de educación digital verdaderamente social, interactiva y orientada al valor. Para los estudiantes y los maestros que dependen de múltiples herramientas para compartir y acceder a diferentes formas de contenido o canales diferentes, surgen dificultades y complejidades que pueden dificultar el proceso de aprendizaje. Una interfaz unificada que impulse todas las actividades es mucho mejor para hacer que el aprendizaje social sea parte integral de la educación digital.
La gamificación del contenido es otro aspecto vital del aprendizaje social. Como educadores, es importante contar con un LMS que vaya más allá de los líderes de tablas, puntos o sistemas de niveles estándar. Juegos numéricos, acertijos de palabras e incluso concursos de quiz interequipos al final de cada capítulo o sección pueden realmente motivar la participación de más estudiantes, trabajar en grupos y lograr un mayor compromiso.
Los estudiantes de hoy son la fuerza laboral del mañana. Los lugares de trabajo futuros se basan en el uso de herramientas modernas de comunicación y colaboración para trabajar en equipos virtuales distribuidos en diferentes ubicaciones. Por lo tanto, el aprendizaje social desde temprana edad es esencial para crear una fuerza laboral preparada para el futuro, que sea experta en el aprendizaje autoorganizado, la compartición de conocimientos y el trabajo en equipo sin problemas.